V.G.F

Que no hace falta que diga que me muero por ti. Que eres el único que me demuestra que merece la pena hacer cualquier cosa por otro segundo más a tu lado. Que un día sin ti es como 24 horas sin una razón para seguir respirando, como una noche de invierno sin sábanas para arroparte, como un día de verano en el desierto del Sáhara sin sombrilla para protegerte. Que el solo hecho de pensar en perderte me duele. Me duele tanto que me va matando lentamente, me va consumiendo. Me va quitando las ganas de sonreír, las cuales me devuelves tú cuando me dices que me quieres. Que cuando estoy contigo soy la chica más feliz del mundo, y cuando estoy sin ti la más afortunada, porque sé que aunque no estemos juntos, estarás echandome de menos. Los cuentos de hadas siempre hablan de príncipes azules y de princesas. De pequeña siempre quise ser una princesita como la de los cuentos, y casarme con un apuesto príncipe. Pero, ¿sabes qué? Ahora me doy cuenta de que los cuentos de hadas hablan de príncipes porque no te conocen a ti. Tú rompes con los esquemas del hombre perfecto, sobrepasas los límites a los que llega el principito. Si Disney te hubiera conocido, los príncipes azules estarían en la cola del paro. ¿Y las princesas? Ya no quiero ser como ellas, ya no quiero un príncipe, solo quiero una cosa. Solo te quiero a ti. Que un 'buenos días' no significa nada si no lo dice tu boca, que el hecho de que haya bancos en el parque no me importa si no me puedo sentar contigo. Que las estrellas no brillan igual si no las ves conmigo, que un 'te quiero' no me hace sonreír si no sale de tu cuerpo. Que sabes mejor que nadie lo mucho que te quiero. Que sabes mejor que nadie que me muero si no te tengo. Que sabes que todo se acaba, pero también sabes mejor que nadie que me gustan los retos